El dorsal número 4 del Real Madrid, Sergio Ramos (el empanao), tiró “accidentalmente” la Copa del Rey cuando la estaba alzando en la parte delantera del autobús madridista durante el recorrido de celebración por las calles de Madrid. Después de dicha celebración, la copa fue trasladada “de urgencia” al Hospital Ramón y Cajal, donde todavía permanece en cuidados intensivos. Se sabe que esta mañana, fue intervenida por un cirujano que antes, curiosamente, era orfebre, y ahora permanece estable y en reposo.
Hoy, mediante un correo anónimo, ha llegado a mis ojos [leí el correo] que Cristiano Ronaldo ha destruido una casa a puñetazos del enorme cabreo que tenía. Al parecer, el fornido mozo compró una casa y pagó a una empresa para que colocara cargas explosivas en su interior (de la casa, no de Cristiano), que serían detonadas tras cada golpe que Cristiano le propiciara a un saco de boxeo. [¿No pensaríais que era a pelo? El chaval está mangado pero no tanto.]
Hace escasos momentos, la Interpol ha emitido una orden de busca y captura del futbolista, quien se halla en paradero desconocido por el momento. Hubo quien dijo que incluso podría estar en un bunker secreto de los Montes Bávaros. Según el comisario jefe de la Interpol, creen que Sergio Ramos podría estar detrás de una organización clandestina que llevaba años planeando tal ataque al Club Blanco.
P.D.: Dedicado a Xurxo, que se está volviendo un seguidor del blog a base de insistirle todos los días en la Facultad.